domingo, 5 de mayo de 2013

Para Ilustrar


Aboru Aboye!
Mis mejores deseos para todos.

Para dar continuidad al empeño de divulgar las características de Ifá Orisa, como forma de eliminar falsos tabúes, quiero en esta ocasión abundar un poco en aspectos que nos diferencian de otras filosofías religiosas.
La filosofía de Ifá Orisa sólo persigue como objetivos larga vida, salud, bienestar, felicidad y armonía para sus seguidores y no seguidores. Adora y venera los difuntos, respeta a los mayores, a los padres y las madres. Promueve la herencia de las buenas costumbres basadas en el respeto a las tradiciones. No guarda rencores ni odios; ni obliga a renunciar a otras creencias religiosas para demostrar fidelidad. Por tanto nadie tiene que tirar o abandonar imágenes o atributos de otras creencias para abrazar nuestra filosofía.
Nunca promovió en sus seguidores guerra alguna por ambición de poderes ni implantación de principios ni criterios.
Se fundamenta en la idea de la presencia de Orùnmìlá junto a Olodumare (Dios) en el momento de la Creación y el Nacimiento de cada ser humano, de ahí su título de Testigo de la Creación. La pacífica labor de Órúnmilá se manifiesta en ayudar con su sabiduría a los Orisas y los seres humanos.
Los Orisas representan los Poderes Naturales reguladores de la existencia, que respetan y tienen en cuenta el consejo de Órúnmilá para ayudar a los seres humanos que les ofrendan y reverencian, a vencer las dificultades terrenales según su destino.








 El sacerdote de Ifá (awo o babalawo, según su rango) es quien interpreta los mensajes que Órúnmilá envía en cada signo, y es mediante esos mensajes que cada persona conoce el orisa tutelar (poder natural que rige su cabeza), su destino terrenal, y los tabúes de los que debe abstenerse para tener una larga y provechosa vida.
Los seguidores y practicantes de Ifá Orisa no están comprometidos ni obligados por Órúnmilá ni los Orisas a la realización de iniciaciones ni ceremonias. De hecho éstas se llevan a cabo cuando la persona las solicita y cumple los requisitos que cada una establece.
El babalawo no cuenta con la anuencia de Ifá para producir daños en las personas a las que ha iniciado, porque en esa iniciación pidió salud, larga vida y bienestar para ellos. 
El padrino (babalorisa) o madrina (iyalorisa) que inicia al nuevo omolorisa (santero(a) está en el deber de enseñarle y ayudarle para que logre los objetivos que le fueron explicados en la ceremonia de iniciación, mediante la observación y respeto de los consejos.

Y hasta aquí por hoy, egbón ati aburos
Seguimos divulgando para hacer más grande nuestra filosofía.

Mo foríbale Ifá Orisa

Okanbi.

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