jueves, 28 de noviembre de 2013

Recapitulando

Aború, aboye, aboshishe!
Mis mejores deseos para quienes lean estas letras!

Hoy comienzo la Recuperación de algunos escritos de mi blog anterior, y que considero de interés.



Del  22 de noviembre del 2009
En el día de hoy trataremos sobre un olodu que hasta hace muy poco representaba, para mi, la fuerza bruta unida a algunos aspectos de dudosa moralidad, porque según algunos escritos; violó a su madre.
Sin embargo, la lectura pausada y el análisis de textos más filosóficos y profundos, me han llevado a cambiar sustancialmente ese criterio y deseo compartirlo con ustedes.
Me refiero a Ogunda Meyi u Ogunda Ja Meyi cuando partió el pescado en 2 partes iguales.
Inseparablemente ligado a Oggún, por ser su odù Isalaye, se le acredita haber combinado la fuerza de Oggún y la inteligencia de Órúnmilá en su trabajo.
Es reconocido como el descubridor del camino, porque encabezó la segunda misión de reconocimiento del cielo a la tierra.
Aunque destaca por ser egoísta y engreído, muy poco dado a consultar con alguien para pedir consejo pues se apoya casi exclusivamente en sus habilidades y en su fuerza física, Ogunda Meyi enseña la necesidad de intentar conseguir las cosas una detrás de la otra, como Olodumare enviaba a las divinidades hacia la tierra para hacerla un lugar habitable.
Olodu donde Órúnmilá manifiesta que el triunfo no ocasiona placer si no ha sido alcanzado luego de superar dificultades iniciales, ante las disculpas de Olokun por los trastornos que le provocó.
Donde surge la rutina de comenzar el día con el mascado de palos o cepillado de los dientes y el enjuague de la boca con agua, a partir de las pautas que Oggún y Olokun marcaron a Órúnmilá y sus seguidores en su camino a la tierra.
Define la tenencia de una casa como una satisfacción mayor que las demás por ser la base para la unión y multiplicación de los humanos, cuando Esù rogó para que ule, la divinidad de la vivienda, siempre tuviera el mayor éxito entre las divinidades.
Y marca aspectos de gran importancia para los momentos actuales a nivel mundial. Surge la necesidad de la conjunción de las capacidades para lograr un orden en la estabilidad social. Ese orden deberá hacerse desde los hacedores a los pensadores. No puede haber intelectuales sin obreros, por ello hay que rendir homenaje y respeto a los que llevan a la realidad las ideas, cuando Orunmila rogó a su hermano Oggún que se quedara con él en la tierra.
La necesidad de información sobre el foco de un peligro cuando atañe a todos, para que no actúe con facilidad, cuando Olodumare designa a la ardilla para que informe de la presencia de la boa.
Acota que no puede olvidarse que los seres humanos somos la descendencia de las divinidades que vinieron a poblar la tierra, y por ello quienes no llegan a descubrir su parentesco ancestral, desconocen sus orígenes y destinos y en consecuencia son quienes encuentran toda clase de dificultades en la tierra al desconocer como conducirse.

Sin dudas, es Ogunda Meyi uno de los olodus más importante, por la profundidad de sus enseñanzas. Maferefun Oggún!

Y hasta aquí por hoy egbon ati aburos.
Seguimos divulgando para aprender
Salud y suerte,

Okanbi 


sábado, 23 de noviembre de 2013

Oturupon Okana

Aboru aboye!
Mis mejores deseos para quienes lean estas letras.

Hoy hablamos del odu 188, Oturupon Okana, conocido como Otrupon Kana en nuestro Ifá Afrocubano, y donde la historia más popular, cuenta que una princesa estaba en mala situación, y buscó el consejo de Ifá, pero tras resolver sus problemas, se olvidó del Awo que le ayudó.
 Sobre la reacción que puede provocar esta interpretación les contaré una anécdota personal y muy reciente, que espero sirva de ayuda a los awo que siguen este blog.
 Aunque en la actualidad realizo el análisis de los odus desde un punto de vista más filosófico, en mi memoria y mi accionar, como en la de casi todos nosotros, se mantienen latentes las formas aprendidas en el afrocubano. Este es un ejemplo.
Bueno, pues me dirigí a una casa para realizar una consulta. La solicitante era la madre de la joven a consultar. Había acordado encontrarme con ella para que me acompañara. Al llegar, noté algo de negatividad o desconfianza, pero la señora logró suavizar un poco el ambiente.
La profecía marcó progreso general (con Oturupon Okana), obstaculizado por gran arrogancia personal, y desatención a la capacidad espiritual.
Al preguntar las vías para vencer el obstáculo, sólo eggun defendía. La consultada admitió, de mal talante, la profecía y los consejos; incluso, tras poner dificultades, decidió hacer las ofrendas marcadas a eggun.
A la hora de marcar el derecho de la consulta, acostumbro preguntar a Ifá, siguiendo criterios personales, y cuando no acierto, pregunto a la persona su criterio. En este caso, la cifra que dijo ella y aceptó Ifá, hizo que me sintiera disgustado y bastante menospreciado, pero tuve la entereza de aceptarlo con tranquilidad. Aunque mi cara y quizás mi actitud demostraron mi estado de ánimo, porque la madre me preguntó si algo me había disgustado.
De regreso a casa, analicé la situación, pensando que el problema estaba en Oturupon Okana, guiándome por la historia de la princesa, pero mi sorpresa fue que, analizado filosóficamente, este odu representa una prueba para todos, también para el awo, porque enseña, según mi análisis; ….. la información para mantener el sistema sano y puro brinda seguridad y balance para actuar con humildad…. si la voluntad personal no está alineada, provoca estrés y vulnerabilidad ante errores en la percepción.
O sea, que mi disgusto fue debido a una sobre valoración personal de lo que hacía, y a la falta de humildad que permite mantener el balance entre pensamiento y actuación! Disgustarse daña la salud!!!!!!!!
Sin pérdida de tiempo, me disculpé con la madre de la consultada, como primer paso para conseguir que Ifá me permita seguir aprendiendo!

Y hasta aquí por hoy egbón ati aburos.
Seguimos divulgando para aprender y mejorar.

Mo foríbale Ifa Orisa.
Okanbi