Mis mejores deseos para quienes lean estas letras. Son un intento de traer a la actualidad los conceptos ancestrales de Ifá Osha.
Hoy hablamos de Iroso Meyi y sus consejos.
Un día más escucho y veo con total felicidad, la comunicación diaria entre mi esposa y apetebi Okantomi, nuestras hijas y nuestros nietos; mediante llamadas y video conferencias, para contar los detalles del día, y escuchar los consejos que ella les brinda. Siempre recuerdo a mi abuela y mi madre; y a veces participo.
Considero que es algo sumamente importante para conseguir que la herencia familiar influya, de forma positiva, en el trayecto y desarrollo de la sociedad actual. En la actualidad no hay distancia geográfica que lo impida y por ello Eshu, el comunicador universal, merece agradecimiento.
Los criterios filosóficos de ese tipo de comunicación aparecen en Iroso Meyi, el uso efectivo de la herencia genética y la guía familiar, pero su aplicación es algo más complejo; pues pasa por entender y aplicar el sencillo detalle de que las madres y los padres, responsables totales de su descendencia, no crucen las calles, por el sitio adecuado, o no, sin tomar la mano a sus menores, y así librarles del peligro. Comúnmente se les puede ver conversando con amistades, o simplemente, pensando en sus cosas, sin mirar hacia atrás para ver el rumbo que ha tomado el menor.
Al extremo contrario y en positivo, hoy; si se desea, se puede ayudar a una niña de 11 años, a cuidar a su hermano de 4; solos en casa porque sus padres están trabajando, creándole además el impulso a cocinar, que le servirá mucho para cuando sea independiente y posteriormente madre, reforzando la relación que mantendrá muy fuerte los lazos familiares.
Sería importante que se lograra aplicar la interpretación adecuada de estos consejos, para actualización y crecimiento de Ifá Osha, y el desarrollo de la ciudadanía mundial.
Y hasta aquí por hoy Abures ati Egbón.
Mo foribale Ifá Osha.
Okanbi.
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