domingo, 3 de agosto de 2014

Oruko, nombre

Aboru Aboye!
Mis mejores deseos para quienes lean estas líneas. Pienso que serán de su interés.

Hoy hablamos del necesario entendimiento de los nombres que se van a imponer a quien se inicia en nuestro Ifá Orisa; primero, para que sirvan de estimulo y recordatorio, y luego, para que puedan tener en su mente las imágenes del nombre a la hora de rezar y pedir.
Es sabido que a los 7 días del nacimiento, nuestros ancestros nombraban al recién nacido, y que cada  nombre tiene un significado.
En nuestras iniciaciones recibimos nombre de omolorisa, en el dia de itan, y como awo en el cuchillo, generalmente. En la mayoría de los casos,el nombre del omolorisa es heredado de algun difunto de la rama, y en el caso del awo, de un difunto con igual signo de ifá.
En mi joko orisa, lo preguntaron,  y en mi itefa, tras muchos intentos fallidos, se oyó desde fuera la voz de mi madrina, proponiendo el que finalmente Orunmila aceptó, y que considero muy adecuado, después de conocer su significado.
Tengo en mi memoria las expresiones y las caras de los awos participantes en el cuchillo de mi primer ahijado, debido a que el nombre que propuse, era desconocido, y por tanto, inusual. Hubo caras raras y comentarios en voz  baja, pero nadie preguntó el significado; con la respuesta positiva de Ifá se hizo un silencio total; pero en un ejercicio de sabiduría, nadie quiso saber el significado. Lo que dice mucho, no es cierto?
Desconozco si la costumbre de preguntar está generalizada, pero lo importante de este escrito es la necesidad de conocer el nombre que se impone, y mucho más para quien lo recibe.
Hoy me refiero a Okantomi; nombre de una omolorisa muy cercana y querida.
En el libro titulado El Yoruba que se habla en Cuba, de Lidia Cabrera, sólo aparece:  Okan to mi.... Nombre del hijo de Oshun.
Revisando en otros diccionarios pude encontrar estas opciones:
Okán - Corazón.
Okán - Uno, un hombre.
Okán - Peso plata o billete.
Okán - Bejuco, enredadera.
Tó – suficiente
Tô – alto, en voz alta.
Tò – pararse en línea, colocarse en orden
Mi – contracción de Emi, yo
Mi – tragar, sacudir, empujar, agitar, alentar, tomar aliento

Como ven, se pone de manifiesto la gran dificultad de la lengua de nuestros ancestros, y de ahí el cuidado que hay que tener para nombrar al nuevo omolorisa o awo, para evitar que ese nombre, en vez de ayudarle, le perjudique.

Por suerte para nuestra familia, Okantomi, es omo Oshún, una madre, esposa, apetebi y abuela llena de dulzura y preocupación por todos, de modo que yo me quedo con  Suficiente corazón para alentar como interpretación;  y quien busque otras verá, que las diversas que se consigan, reflejan de manera positiva, su forma de ser y actuar.

Y hasta aquí por hoy egbón ati aburos.
Seguimos divulgando para aprender y mejorar.
Mo foribale Ifá Orisa.

Unawo